Ciertos sonidos parecen escurridizos. Todos los idiomas los contienen y muchos son notoriamente difíciles de emular. Por ejemplo, muchos coreanos y japoneses tienen problemas con los sonidos "R" y "L". Un ejemplo dramático es el de un anuncio de radio en el que un coreano intenta corregir la pronunciación del coche "Hyundai" de un estadounidense. Tras varios intentos, el coreano admite que no puede decir "Chevrolet".
Los hispanohablantes pueden tener ataques a los sonidos ingleses "T", "D" y "Th", pero quizás lo más notable es su insistencia en poner un sonido "Eh" delante de las palabras que empiezan con la letra "S". Al fin y al cabo es la letra "ESS" y ellos hablan español. Pero realmente no hay demasiadas palabras en inglés que empiecen por "Es..." (Especialmente, Essence, Essential, Escape, etc...)Ese problema se agrava cuando a una palabra que termina en la letra "S" le sigue inmediatamente otra que empieza por la letra "S". Para evitar el sonido "Eh", animo a los alumnos a combinar esas dos palabras para que suenen como una sola. Por ejemplo, la frase "Esta casa está vendida". puede sonar como "This house is Esold". Combinar las dos palabras "is" y "sold" en "issold" sin ninguna vacilación entre las dos palabras produce un sonido más natural y prohíbe la invasión de ese sonido "Eh".